El Derrocadero Digital: Reliquias curiosas

Hace unos días estuvimos en Oviedo y estuvimos viendo su catedral. A raíz de esta visita surgió una conversación acerca de las reliquias guardadas en distintas catedrales e iglesias, algunas de ellas tan inverosímiles como curiosas. Este es un pequeño resumen de algunas de esas "curiosas colecciones".

El anillo nupcial de Santamaría virgen se haya en la provincia de Albacete. Otro idéntico pertenece a los herederos británicos del duque de Berry.
La Oreja de San Pedro, que es propiedad del abad de Cleriac y de San Leonardo en Porto Mauricio.
Brazo de Santa María virgen, recogido juntamente con su hígado, en las habitaciones de San José de Calsanz, en San Pablo Pantaleone, Roma.
Una de las sandalias de Jesucristo, parece ser que actualmente está en el Vaticano.
El mítico Grial, el cáliz de la ultima cena, que se venera en la catedral de Valencia, y los incomprensiblemente también auténticos griales, que se encuentran en Borionda, "El Santo Catino" en Génova, "Il volto santo" en lucca. Hay otro en el convento de Lyon y por último el de la catedral de Reims. Vamos, toda una vajilla.
Más curiosa aun es la reliquia de la campana en cuya fundición se utilizó el cobre de una de las treinta monedas que cobro Judas, y que se conserva en Velilla del Ebro, España.
El pelo de María Santísima y también el de la Magdalena, venerados en Sangüesa, España, y el de Juan, el discípulo predilecto y que en extraña combinación cubre el cráneo de Santa Aguere, en Italia.
La cola del asno que llevó en sus lomos a Jesús. Una ha desaparecido y otra se conserva en Museo de Prehistoria Contemporánea De Roma (en adelante MPC).
Son varios los clavos de la crucifixión que se conservan: existen tres en Santa Maria Práxedes, dos en san Pietro, uno en Santa Cruz de Jerusalén y un largo etcétera.
La columna sobre la que cantó el gallo de San Pedro. Se encuentra en San Marcelo de Roma.
El corazón de la Virgen María y también de su lengua, todo en el mismo relicario de san Pantaleone en Roma.
Es curioso el caso de Juan el Bautista: sólo de él se cuentan venerados la cantidad de sesenta dedos además, en iglesias y conventos sobre todo. No se tiene nada documentado sobre que tuviese tantos dedos...
Otra reliquia excepcional es el cuchillo con que se circuncidó a Jesucristo. Hubo más de uno y el que se conserva esta M.P.C. en Roma.
La leche de Santa María Virgen se conserva en varios lugares, siendo las más celebres la de la catedral de Oviedo y la que se venera en los agostinos de Santa María de Popolo en Roma.
También existen lágrimas de Santamaría veneradas en Vendome.
Pero si hay alguna reliquia inverosímil es la de trece lentejas de la última cena. Hay ejemplares en el Sancta Sanctórum y en el M.P.C. de Roma, conjuntamente con pan sobrante de la misma.
Tenemos también en la catedral de Valencia la toalla, con la que Jesús enjuago los pies de los apóstoles.
No podía faltar el mantel de la Ultima Cena, que se muestra una vez al año en la iglesia de la ciudad de Coria, España. Y si se tiene el mantel, no podía faltar la mesa en la que se realizó la cena, que se venera en una archibasílica romana. Pero el desconcierto llega al encontrarnos con otra mesa de la Ultima Cena en la catedral de Sevilla.
Curiosa también es la barca de piedra sobre la que navego la Virgen y que se venera en el santuario de Muxia.
Hay también dos mantos de Jesús, uno que se venera el la basílica valenciana y el otro en Santa María de Arriaga, en Valladolid.
Los pañales de Jesucristo se veneran como gran reliquia, y son custodiados por los servitas de San Marcello, Roma.
La pluma de las alas de los Ángeles Gabriel y Miguel que se veneran en Liria. También existe, la pluma que utilizó el evangelista Marcos para escribir su evangelio.
La piedra que sobre la que cayó el Santo prepucio del niño Jesús, que se veneraba en San Giacomo del Burgo en Roma hasta que fue robada.
Se llegaron a venerar hasta 14 santos prepucios de Jesucristo. Hoy solo se rinde culto al de Amberes, Colcata, Santiago de Compostela y Hildesheim. Todo un fenómeno...
Los rayos de la estrella de los magos y que tiene en su colección El M.P.C. de Roma.
La sangre de Cristo también es una de las reliquias más apreciadas y se venera en Venecia.
Las espinas de la corona de Cristo también se veneran en varios lugares. Así tenemos la de Petilla. 2 más en Santa Croce de Jerusalén, en Roma, Otras cinco en la catedral de Oviedo y cuatro más en la de Sevilla.
Otro tipo de espinas tuvieron también veneración y son la de las raspas de los peces multiplicados por Jesús.
Un estornudo del Espíritu Santo que, encerrado en una botella, se veneraba en la iglesia de san Frontino y hoy se halla en el Sancta Sanctórum en el Vaticano.
No podía faltar una paja del portal de Belen, venerada en Roma, en Santa María la mayor, y que es propiedad de los Reyes de España.
La Sabana Santa... La más nombrada es la de Turín, la otra se venera en Sangüesa y la tercera, aunque sólo del rostro, en la catedral de Oviedo.
También existe un suspiro de San José, recogido también en una botella y depositado por un ángel en una iglesia cercana a Blois. Ahora se conserva en el Sancta Sanctórum del Vaticano.
El ombligo santo o Santo cordón umbilical de nuestro Señor Jesucristo. Se le rinde culto en iglesia de Santamaría de Popolo, en Roma. Existe otro en San Martíno y existió otro en Chalons. Vamos, que Jesus tuvo tres ombligos...
El velo de la cabeza de la virgen Maria, que se venera en Sangüesa. Existe otro en San pietro de Roma y otro más en la catedral de Jaens.
Pero probablemente la más original de todas las reliquias veneradas es la de las "posaderas" de nuestro Señor Jesucristo, que quedaron marcadas sobre la piedra en que se sentó y que se venera en Reimss.
También se conserva y veneran la huella de sus pies, que se guardan en el museo del Capitolio. Juntamente a esas huellas de pies, tenemos la de la Virgen María en la antigua iglesia de Leixetia.